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El grupo sitúa la alimentación y nutrición en sus residencias como prioridad. En esta iniciativa participa el chef Diego Guerrero, que posee dos estrellas Michelin.
A fuego lento se cocina la historia de nuestras vidas. Y, en los fogones de Orpea, preparan cada día valiosas recetas que enseñan a saborear y disfrutar de todo lo que la vida nos brinda. Recetas que aportan salud y bienestar a los residentes y sus familias.
Orpea Ibérica sitúa la alimentación y nutrición, en sus residencias, como prioridad, porque contribuye de manera importante a la salud y calidad de vida de sus residentes. Por ello, los centros cuentan con cocina propia en la que se diseñan menús adaptados, elaborados por dietistas y nutricionistas y supervisados por la dirección médica del grupo y el equipo médico del centro. Es más, Orpea ha innovado desarrollando “la comida texturizada”, una técnica que logra una nutrición e hidratación adecuada para aquellos mayores con problemas de deglución (dificultad para tragar), y que también favorece que recuperen el placer por comer.
Por todo ello, surge la iniciativa “Entrevistas a Fuego Lento”, donde Orpea pone en valor la importancia de la restauración en nuestras vidas a través de la historia de dos de sus residentes: Pilar Alonso, cocinera del mítico Restaurante “La Bola”, y José Pérez, maitre en el Hotel Plaza de Madrid. ¿Y qué mejor confidente que el chef dos estrellas Michelin, Diego Guerrero?
Entrevistas cocinadas a fuego lento y con mucho cariño, que nos enseñan a saborear cada momento para terminar en la receta más importante: la historia de dos expertos en el arte culinario y también en el de vivir plenamente.
